Las plantas de interior constituyen el mayor reto para los apasionados de la jardinería. Al contrario que en un entorno exterior, debemos aunar varios factores como es el suministro de agua y luz solar (directa o indirecta), la decoración del macetero y la elección de la propia planta, así como la temperatura ideal para su crecimiento.
Las plantas que son específicamente de interior nos ofrecen una mayor facilidad para que su crecimiento sea óptimo, pero aún así es notablemente más complejo conseguir decorar nuestro hogar con plantas de interior, que en las zonas exteriores de la casa.
Es por ello que muchas empresas están presentando alternativas más eficientes para las plantas de interior, con trucos suficientes como para asegurar al máximo posible que su crecimiento esté en los valores óptimos esperados.
Unos materiales resistentes pero con diseño
Frente a la gran mayoría de estructuras que ofrecen resistencia, pero carecen de diseño atractivo, en este caso se ha optado por plástico de gran calidad libre de tóxicos (bisfenoles), que asegura resistencia y, gracias a su acabado blanco y diseño neutral, permite ser utilizado con cualquier diseño de interiores.
Tan pequeño como práctico
En los espacios interiores el espacio es una desventaja muy importante. No podemos escoger cualquier tipo de plantación, ya sean flores o plantas ornamentales y decorativas, dado que siempre nos veremos limitados en diámetro.
Por eso la fórmula de estructuras verticales ampliables con módulos constituye el mejor truco para conseguir un jardín hermoso y sano en el interior del hogar.
El planteamiento es que cada módulo puede albergar varias plantas o flores. En caso de requerir más espacio, se coloca un módulo superior y el diámetro permanece invariable, mientras nuestro jardín vertical sigue creciendo.
El mantenimiento correcto
Pese a todos los trucos que puedan aplicarse, el secreto para una planta crezca fuerte es saber mantenerla correctamente. Los sistemas modulares que os hemos estado presentando utilizan cultivos hidropónicos, sistemas inteligentes de riego y sustrato de perlita en lugar de tierra tradicional.
Gracias a estos elementos, el usuario no necesita grandes conocimientos sobre jardinería, para conseguir mantener de forma óptima el crecimiento de las plantas, pues básicamente el sistema automático es el encargado de mantener un equilibrio correcto entre agua y fertilizante.