Sencillez, iluminación y calidez, tres adjetivos que se hacen realidad con el ambiente nórdico, un estilo decorativo que puede aplicarse a cualquier parte de la casa y que es ideal para los meses de invierno.
Muchos seguidores tiene esta tendencia en la decoración. Y es que al potenciar el uso del tono blanco y lo sobriedad en la decoración de accesorios, transmite esa añorada sensación de hogar, tan necesaria hoy en día.
Decorar un comedor al estilo nórdico es muy sencillo; basta con conocer algunos detalles que pondremos a tu disposición en el presente artículo.
USO DEL COLOR Y ACCESORIOS
Si bien el estilo nórdico privilegia el uso del color blanco, el contraste de este con el negro es identificativo de esta forma de decorar, tanto como lo es la presencia de luz natural.
De tal forma, a la hora de decorar un comedor al estilo nórdico se deben privilegiar los suelos y paredes claras. Por otra parte, las alfombras con formas geométricas, plantas naturales y las ventanas sin cortinas u otros elementos que impidan la entrada de luz son perfectas para logra tu objetivo.
Aunque el estilo nórdico se caracteriza por la sencillez, es oportuno colocar cuadros simples y modernos en las paredes, así como colocar en la habitación una lámpara de pie con aspecto industrial y un carrito de cocina con imagen rústica. Todo ello es posible porque el estilo nórdico permite combinar diferentes corrientes decorativas.
En todo comedor, principalmente los nórdicos, queda muy bien un mueble de grandes puertas que permita almacenar la vajilla, mantelería y cubertería.
La mesa ideal para un comedor estilo nórdico es una con tablero blanco y patas de color madera. Por su parte, las sillas que completarán este juego d comedor pueden ser o no del mismo estilo, y recrear el ambiente nórdico, así como conferir un sello original al comedor.